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Ilustraciones por Yocaro |
Hace algunos años pedí un vestido prestado a una amiga, pero no era para mí, era para mi hermana, quien lo necesitaba para asistir a un matrimonio. Cuando llegó a la casa me dijo “Pame ¡se me rompió el vestido de tu amiga!”...
¡¡¡Shuuuuuuuuuuuuuuuuuu!!! A mi pobre hermana se le había quedado enganchado el vestido en un clavito o algo así.
El tajito era pequeño, pero la tela era una gasa muy delicada, así que el hoyito se notaba caleta y se iba a ir agrandando con el paso del tiempo. Mi hermana tenía ganas de comprárselo a mi amiga porque era un vestido realmente bello, así que con lo del tajito no le quedó otra y lo compró. Nuestra solución súper-estética fue coser sobre el hoyito un parche elegante que combinaba con el vestido y así lo usamos por harto tiempo, jejeje.
El tajito era pequeño, pero la tela era una gasa muy delicada, así que el hoyito se notaba caleta y se iba a ir agrandando con el paso del tiempo. Mi hermana tenía ganas de comprárselo a mi amiga porque era un vestido realmente bello, así que con lo del tajito no le quedó otra y lo compró. Nuestra solución súper-estética fue coser sobre el hoyito un parche elegante que combinaba con el vestido y así lo usamos por harto tiempo, jejeje.
El Pipe se engancha la ropa bien seguido. A veces llega a la casa con carita de “hice algo malo” y obvio que se trata de que se le rompió algo, así que desde que trabajo en diseño textil le arreglo la ropa a él y a veces a una pequeña (pero fiel) lista de clientes. Me piden que: achique poleras, camisas, que “apitille” pantalones, que haga bastas, o que arregle ese típico desgaste de los jeans en la entrepierna. Por otro lado, con el Pipe compramos la mayoría de nuestra ropa en las tiendas de ropa usada y SIEMPRE hay algún arreglín que hacer. Una vez compramos una chaqueta para el Pipe y era tanto lo que había que arreglarle que prácticamente lo hice de nuevo.
Arreglar ropa es MUCHA PEGA si uno se preocupa de hacerlo realmente bien, porque no es llegar y coser, el trabajo de reparar una prenda de ropa es todo un arte. Hay personas que se dedican a esto y no siempre lo hacen bien. Pero hay otras que sí trabajan bien, que se preocupan de la estética de la prenda y que trabajan prolijamente. ¿Han escuchado del Zurcidor Chino o Zurcidor Japonés? Yo lo conocí hace un par de años no más, y creo que si hubiera conocido estos lugares antes jamás le habría pegado un parche al vestido, por muy elegante que fuera, porque en el Zurcidor Chino hacen maravillas. Por ejemplo, si quieren hacerle la basta a sus jeans y que no se note que están arreglados, vayan al Zurcidor Chino donde hacen lo que se llama la “basta original”, que deja la basta con el desgaste original que traen los jeans. También puedes llevar cualquier tipo de pantalón desgastado en la entrepierna, en el Zurcidor Chino sacarán toda esa parte desgastada y la remplazarán por una nueva pieza que les durará mucho tiempo, incluso ellos mismos tienen telas de varios colores y texturas para elegir el trozo que más se parezca a tu pantalón.
Achican ropa, agrandan ropa, puedes llevar ese vestido caro y elegante que se te quedó enganchado en un clavito, o tu chaqueta de cuero, de gamuza, o tus jeans de marca, etc, etc, etc. Tal como me dijo su dueño “no hay nada difícil, todo se puede arreglar”
¡Es tan fácil comprar ropa en estos tiempos! En lugar de gastar menos tiempo y menos dinero en mandar a arreglar la prenda que se nos rompió, vamos a la tienda y compramos otra, así de simple. Pero mejor, cuando tengas un tiempito, lleva al Zurcidor Chino las que ahora son “unas pilchas rotas” y pregunta si pueden arreglarlas, te aseguro que recuperarás más de alguna de tus prendas favoritas.
Obviamente hay muchas otras personas que trabajan en este oficio de manera impecable y que no trabajan en ningún local de Zurcidor Chino, pero yo, por mientras, te dejo los datos de los locales de Zurcidor que conozco acá en Viña del Mar: hay uno en la Plaza Portal Álamo local 19 y otro en Arlegui entre Ecuador y Von Schroeders.
Experiencias, datos ¡todo sirve! Compártelos acá.